Volvo V50

La versión familiar del nuevo Volvo S40 se llama V50, y llegará al mercado a finales de marzo de 2004. Por tamaño, categoría y precio, el V50 (que sustituye al V40) se posicionará en el segmento de los Alfa Romeo Sportwagon o Audi A4 Avant, por citar a dos de sus rivales más directos. La marca sueca apuesta fuerte por las carrocería familiares, pues aunque en España nos soprenda -debido a la discreta aceptación de los SW- en el mercado global Volvo espera vender más unidades del V50 (74.000 al año) que del S40 (70.000 al año). Este dato viene motivado por la afición demostrada a los SW por los mercados principales de Volvo: los países nórdicos y Estados Unidos.

Mecánicamente la gama inicial dispondrá de cuatro motores, tres de gasolina y uno diesel. El diesel será el ya visto en otros automóvles del Grupo Ford, como el Mazda 3 o el Ford Focus C-Max; es decir, un 2.0 de 136 cv. Con él el V50 logra unas excelentes prestaciones, pues acelera de 0 a 100 km/h en 9,6 segundos, llega a los 210 km/h y sólo gasta 5,7 l/100 km como media. Las variantes de gasolina parten de sendos propulsores atmosféricos de 2,4 litros de cilindrada, uno con 140 cv y otro con 170 cv; y culminan con el T5, que con sus cinco cilindros en línea, 2,5 litros de cilindrada y un turbocompresor consigue nada menos que 220 cv. De este modo, el V50 T5 pasa de 0 a 100 km/h en sólo 6,9 segundos, llega a 240 km/h y gasta 8,8 l/100 km de media. Para el V50 existen cajas de cambio manuales de cinco y seis velocidades, y una automática con mando secuencial de cinco velocidades. El precio de los V50 todavía no se ha desvelado, pero con el anuncio de un incremento de 1.500 euros sobre la versión sedán (S40) el V50 más económico costará poco más de 21.000 euros. A lo largo del año irán apareciendo nuevos motores de menor potencia, tanto en diesel como en gasolina; y la también tracción total, reservada a la versión más potente.