En el seno del grupo Volkswagen llevaban años estudiando la creación de un SUV de altas prestaciones que entrase a formar parte del selecto grupo de vehículos de grandes dimensiones del segmento Premium, para entrar a rivalizar directamente con los modelos ya existentes de la competencia. En varios salones internacionales del automóvil han dado muestra de los que ellos entendían por un SUV, con el diseño propio de la marca de los cuatro aros, denominado Pikes Peak Quattro, un atractivo vehículo de tremendas proporciones con un agresivo diseño que cautivó a todo el mundo. Como también cautiva el modelo Q7 de Audi que deriva de aquel prototipo, gracias a un diseño fiel a la primera muestra, con una carrocería titánica de más de 5 metros con unas formas suaves redondeadas que siluetean un conjunto fluido y refinado. La línea de techo cae hacia la zona trasera suavizando su imagen y transmitiendo el dinamismo característico de la marca, que se apoya en unas grandes puertas con pequeñas ventanillas laterales, sugiriendo fuerza y dinamismo. La zaga se muestra muy aplomada, sin estridencias en su imagen, con unos grandes faros y un portón de maletero abombado que cubre toda la parte trasera. El lateral muestra la característica línea de cintura dinámica de Audi, que cobra mayor vitalidad sobre una carrocería tan grande.
Con estas dimensiones, la capacidad y habitabilidad interior es una de sus principales cualidades, pudiendo albergar opcionalmente hasta 7 personas en sus tres filas de asientos con una sensación de espacio inigualable. Pero lo más llamativo es la calidad de vida de cada uno de los pasajeros, puesto que como este SUV pertenece al segmento de los coches de lujo, Audi ha echado el resto en lo que a confort, ergonomía y equipamiento se refiere. Así, los siete pasajeros disfrutarán de una habitabilidad y comodidad envidiables, gracias a unos grandes asientos opcionales de piel en nuestra unidad de pruebas, mientras que serán los de la segunda fila los que gocen de mayor espacio para las piernas, siendo el líder de su clase. La tercera fila de asientos se abate sobre el piso del maletero para dejar un tremendo espacio de carga plano de 775 litros con la configuración de 5 asientos, que puede llegar hasta los 2.035 litros cuando se abaten todos los asientos menos el del conductor. Con los 7 asientos desplegados el espacio es menor pero sus 330 litros resultan suficientes. El propulsor elegido para nuestra prueba ha sido el más representativo de la gama y, sin duda el que atraerá el mayor número de miradas, el 3.0 TDI en configuración de 6 cilindros en V que desarrolla 233 cv de potencia y un descomunal par motor de 500 Nm que comienza a entregar en su totalidad desde las 1.750 rpm, lo que garantiza unas excelentes prestaciones y una economía de consumo destacable.
n cuanto al precio de esta versión diesel del Q7 se coloca a la altura de sus rivales directos encuadrados en el segmento SUV Premium, con una cantidad de 56.300 euros. Con un desembolso aproximado se podría adquirir un Porsche Cayenne, sin motorización diesel en su gama, un Range Rover, con un motor diesel menos potente, su primo hermano Volkswagen Touareg, que actualmente ha recibido un importante restyling, con el mismo motor pero de menor categoría y algo más barato, o el Mercedes ML, con un comportamiento bastante menos deportivo. Lo que diferencia al Q7 de todos sus rivales es que es el único en ofrecer 7 plazas, siendo pionero en el segmento. La imagen general es muy dinámica y transmite mucha fuerza, donde la mayor agresividad recae sobre el frontal, con la típica parrilla de Audi con el marco y las barras cromadas de inmensas proporciones que incorpora el logotipo de cuatro aros protagonizando la escena, unos grupos ópticos muy afilados con dobles ópticas halógenas bien diferenciadas que se extienden hasta las aletas laterales, pudiendo ofrecer opcionalmente luz de xenon y haz de luz autoadaptativo, y unos intermitentes de led´s en la zona baja del paragolpes, integrados en las aperturas laterales de ventilación. Aún más abajo encontramos los faros antiniebla redondos. Su imagen musculosa sugiere lo mejor de los mundos que representa, el dinamismo de sus altas prestaciones y la robustez de su carrocería todoterreno.
Los voladizos son muy cortos, lo que favorece notablemente la conducción Off-Road, con unos ángulos de ataque y salida muy amplios que ayudan a evitar roces de la carrocería con los obstáculos del suelo, que además se cuida con protecciones plásticas por toda la zona inferior de la carrocería. El lateral también transmite mucha fuerza mediante superficies metálicas muy amplias respecto a la poca profusión de superficies acristaladas, lo que da sensación de protección y seguridad. Los amplísimos pasos de rueda contribuyen a reafirmar esa imagen de fuerza y albergan llantas de hasta 20 pulgadas de diámetro. Un rasgo de distinción y elegancia transcurre por los laterales de punta a punta en forma de línea dinámica sobre los pasos de rueda, desembocando en los faros y dibujando una alta línea de cintura muy dinámica. La línea del techo fluye en disminución hacia la parte trasera, que se ve suavizada por esta silueta. El portón trasero cobra un gran protagonismo, puesto que abarca toda la zaga hasta el paragolpes dejando una inmensa boca de carga. Los faros traseros redondeados en forma trapezoidal muestran un diseño muy personal, en consonancia con los faros antiniebla y de marcha atrás integrados en el paragolpes en su parte central. El logotipo de los cuatro aros también cobra gran importancia en esta vista.
Con estas dimensiones, la capacidad y habitabilidad interior es una de sus principales cualidades, pudiendo albergar opcionalmente hasta 7 personas en sus tres filas de asientos con una sensación de espacio inigualable. Pero lo más llamativo es la calidad de vida de cada uno de los pasajeros, puesto que como este SUV pertenece al segmento de los coches de lujo, Audi ha echado el resto en lo que a confort, ergonomía y equipamiento se refiere. Así, los siete pasajeros disfrutarán de una habitabilidad y comodidad envidiables, gracias a unos grandes asientos opcionales de piel en nuestra unidad de pruebas, mientras que serán los de la segunda fila los que gocen de mayor espacio para las piernas, siendo el líder de su clase. La tercera fila de asientos se abate sobre el piso del maletero para dejar un tremendo espacio de carga plano de 775 litros con la configuración de 5 asientos, que puede llegar hasta los 2.035 litros cuando se abaten todos los asientos menos el del conductor. Con los 7 asientos desplegados el espacio es menor pero sus 330 litros resultan suficientes. El propulsor elegido para nuestra prueba ha sido el más representativo de la gama y, sin duda el que atraerá el mayor número de miradas, el 3.0 TDI en configuración de 6 cilindros en V que desarrolla 233 cv de potencia y un descomunal par motor de 500 Nm que comienza a entregar en su totalidad desde las 1.750 rpm, lo que garantiza unas excelentes prestaciones y una economía de consumo destacable.
n cuanto al precio de esta versión diesel del Q7 se coloca a la altura de sus rivales directos encuadrados en el segmento SUV Premium, con una cantidad de 56.300 euros. Con un desembolso aproximado se podría adquirir un Porsche Cayenne, sin motorización diesel en su gama, un Range Rover, con un motor diesel menos potente, su primo hermano Volkswagen Touareg, que actualmente ha recibido un importante restyling, con el mismo motor pero de menor categoría y algo más barato, o el Mercedes ML, con un comportamiento bastante menos deportivo. Lo que diferencia al Q7 de todos sus rivales es que es el único en ofrecer 7 plazas, siendo pionero en el segmento. La imagen general es muy dinámica y transmite mucha fuerza, donde la mayor agresividad recae sobre el frontal, con la típica parrilla de Audi con el marco y las barras cromadas de inmensas proporciones que incorpora el logotipo de cuatro aros protagonizando la escena, unos grupos ópticos muy afilados con dobles ópticas halógenas bien diferenciadas que se extienden hasta las aletas laterales, pudiendo ofrecer opcionalmente luz de xenon y haz de luz autoadaptativo, y unos intermitentes de led´s en la zona baja del paragolpes, integrados en las aperturas laterales de ventilación. Aún más abajo encontramos los faros antiniebla redondos. Su imagen musculosa sugiere lo mejor de los mundos que representa, el dinamismo de sus altas prestaciones y la robustez de su carrocería todoterreno.
Los voladizos son muy cortos, lo que favorece notablemente la conducción Off-Road, con unos ángulos de ataque y salida muy amplios que ayudan a evitar roces de la carrocería con los obstáculos del suelo, que además se cuida con protecciones plásticas por toda la zona inferior de la carrocería. El lateral también transmite mucha fuerza mediante superficies metálicas muy amplias respecto a la poca profusión de superficies acristaladas, lo que da sensación de protección y seguridad. Los amplísimos pasos de rueda contribuyen a reafirmar esa imagen de fuerza y albergan llantas de hasta 20 pulgadas de diámetro. Un rasgo de distinción y elegancia transcurre por los laterales de punta a punta en forma de línea dinámica sobre los pasos de rueda, desembocando en los faros y dibujando una alta línea de cintura muy dinámica. La línea del techo fluye en disminución hacia la parte trasera, que se ve suavizada por esta silueta. El portón trasero cobra un gran protagonismo, puesto que abarca toda la zaga hasta el paragolpes dejando una inmensa boca de carga. Los faros traseros redondeados en forma trapezoidal muestran un diseño muy personal, en consonancia con los faros antiniebla y de marcha atrás integrados en el paragolpes en su parte central. El logotipo de los cuatro aros también cobra gran importancia en esta vista.