Probablemente el Bentley Continental GT fuese considerado hasta ahora como el coupé más elegante y confortable de cuantos de venden en el mercado; aunque los conductores más entusiastas de la conducción deportiva quizá echasen de menos un tacto más “racing”. Pues bien, la marca de superlujo del Grupo VW lanza el Continental GT Speed, una versión potenciada y puesta a punto para ofrecer unas sensaciones de conducción más dinámicas y excitantes. Con este modelo Bentley bate además su propio récord, siendo el más potente y rápido de todos los tiempos en la historia de la marca. No disponemos de su precio exacto, pero a buen seguro superará los 200.000 euros, ya que el Continental GT de “sólo” 560 cv cuesta 198.000 euros.
Esta imponente realización deportiva -que para nada olvida el lujo característico de la marca- toma la denominación Speed en conmemoración de los legendarios modelos de los años 20 que tantas satisfacciones dieron a la compañía británica. Aporta un plus de deportividad y tecnología, pero aún así sigue militando en un segmento bastante más conservador y señorial que las realizaciones más radicales últimamente presentadas: Ferrari F430 Scuderia y Porsche 911 GT2. En todo caso, puestos a buscar rivales más cercanos, el Bentley Continental GT estaría más en la órbita de un Mercedes CL63 AMG que en la de los dos modelos antes nombrados. El imponente motor de seis litros caracterizado por su curiosa disposición W12 y con dos turbos recibe una serie de mejoras para ganar 50 cv, pasando así a los 610 cv. Pero más todavía aumenta su par motor, de 650 a 750 Nm, y además a un bajo régimen de sólo 1.750 rpm que le permite un amplísimo margen de utilización. Las prestaciones han mejorado, y así el GT Speed registra en el 0 a 100 km/h 4,5 segundos, mientras que la velocidad máxima llega a los 326 km/h. El sistema de tracción sigue siendo integral a las cuatro ruedas, y a través de una caja automática ZF con función secuencial de seis velocidades.
Pero técnicamente a nivel de bastidor y puesta a punto también encontramos numerosos cambios. La suspensión neumática ha sido tarada específicamente para esta versión, e incluso rebaja la altura del conjunto en 10 mm; mientras que la llanta es de garganta más ancha y de diámetro más grande, y el neumático de perfil más bajo: ahora con 275/35 R20, con gomas Pirelli P Zero. Otro aspecto en el que ha mejorado el Continental GT Speed para la conducción deportiva es el del programa electrónico de estabilidad, ahora con función “Sport Traction” para ofrecer unas correcciones más suaves y menos intrusivas. Por último, decir que en cuanto a opciones, se pueden solicitar los frenos cerámicos, que cuentan con discos de 420 mm de diámetro en el tren delantero y de 356 mm en el trasero. Finalmente, la estética se ha modificado de forma discreta para esta versión Speed. Además de las llantas, que son de serie con 20 pulgadas y de diseño específico, unas salidas de escape más grandes, así como la parrilla frontal y las tomas de aire rediseñadas. En el interior, un pedalier deportivo y unos logos más visibles, o nuevas tonalidades de pintura y tapicerías se encargan de poner la nota distintiva.
Esta imponente realización deportiva -que para nada olvida el lujo característico de la marca- toma la denominación Speed en conmemoración de los legendarios modelos de los años 20 que tantas satisfacciones dieron a la compañía británica. Aporta un plus de deportividad y tecnología, pero aún así sigue militando en un segmento bastante más conservador y señorial que las realizaciones más radicales últimamente presentadas: Ferrari F430 Scuderia y Porsche 911 GT2. En todo caso, puestos a buscar rivales más cercanos, el Bentley Continental GT estaría más en la órbita de un Mercedes CL63 AMG que en la de los dos modelos antes nombrados. El imponente motor de seis litros caracterizado por su curiosa disposición W12 y con dos turbos recibe una serie de mejoras para ganar 50 cv, pasando así a los 610 cv. Pero más todavía aumenta su par motor, de 650 a 750 Nm, y además a un bajo régimen de sólo 1.750 rpm que le permite un amplísimo margen de utilización. Las prestaciones han mejorado, y así el GT Speed registra en el 0 a 100 km/h 4,5 segundos, mientras que la velocidad máxima llega a los 326 km/h. El sistema de tracción sigue siendo integral a las cuatro ruedas, y a través de una caja automática ZF con función secuencial de seis velocidades.
Pero técnicamente a nivel de bastidor y puesta a punto también encontramos numerosos cambios. La suspensión neumática ha sido tarada específicamente para esta versión, e incluso rebaja la altura del conjunto en 10 mm; mientras que la llanta es de garganta más ancha y de diámetro más grande, y el neumático de perfil más bajo: ahora con 275/35 R20, con gomas Pirelli P Zero. Otro aspecto en el que ha mejorado el Continental GT Speed para la conducción deportiva es el del programa electrónico de estabilidad, ahora con función “Sport Traction” para ofrecer unas correcciones más suaves y menos intrusivas. Por último, decir que en cuanto a opciones, se pueden solicitar los frenos cerámicos, que cuentan con discos de 420 mm de diámetro en el tren delantero y de 356 mm en el trasero. Finalmente, la estética se ha modificado de forma discreta para esta versión Speed. Además de las llantas, que son de serie con 20 pulgadas y de diseño específico, unas salidas de escape más grandes, así como la parrilla frontal y las tomas de aire rediseñadas. En el interior, un pedalier deportivo y unos logos más visibles, o nuevas tonalidades de pintura y tapicerías se encargan de poner la nota distintiva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario